Nueva afectación en casona de El Jovito genera situación de riesgo para sus habitantes

Raúl Meneses Benítez es un sangileño que desde hace 16 años, por orden verbal del quien fuere el alcalde de la época, Javier Agón Martínez, reside en la casona ubicada en la vereda El Jovito y ha estado a su cuidado desde entonces. Según él, ninguna administración le ha hecho mantenimiento a este inmueble que se ha deteriorado con el tiempo, a tal punto que varias partes de su techo se han ido al suelo en reiteradas ocasiones, esto sin que las autoridades le pongan la debida atención. Sin embargo, el pasado miércoles, colapsó nuevamente parte de ese techo, poniendo en riesgo la integridad de Raúl y su familia. La parte de la casa que se derrumbó, cayó en la zona donde están ubicados el lavadero y los baños, los cuales utilizan los niños, niñas y jóvenes que practican patinaje porque los que hay en el patinódromo no cuentan con el servicio de agua. Ante este peligro, los residentes son conscientes que deben abandonar dicha casona pero temen que al hacerlo no les reconozcan su trabajo realizado durante estos años al cuidarla, además que no cuentan con un lugar a donde ir.

Una vez la Administración Municipal conoció el hecho, al lugar acudieron el secretario del Interior, Gonzalo Medina Silva, y la secretaria (E) de Planeación, Erika Viviana Ballesteros Balaguera, entre otros funcionarios, a fin de establecer el nivel de riesgo que corren quienes están allí y evaluar las condiciones de la vivienda. Ante esto, la funcionaria Ballesteros Balaguera precisó que efectivamente a este inmueble no se le ha hecho intervención alguna, razón por la cual está bastante afectado; asimismo aseguró que la causa del último desplome es la debilidad e inestabilidad de las vigas que se encuentran invadidas por isópteros. El equipo de la secretaría llevará a cabo una atención primaria del riesgo y retirará los escombros para evitar que se presenten accidentes. Para la arquitecta sería importante generar un proyecto para restaurar la casa que data de más de 100 años y, por lo tanto, es un patrimonio de los sangileños.

En cuanto a la reubicación de la familia, el inspector de policía de San Gil, Juan Pablo Reyes Avendaño, manifestó que luego de la visita y de evidenciar el alto riesgo que corren quienes allí residen, se reunirá con un comité a fin presentar el caso para evaluarlo y establecer de qué forma se le puede brindar el apoyo necesario para que a Raúl Meneses, su esposa y su hijo, de 9 años, se les garanticen las condiciones de una vida digna en otro lugar.